Al menos un soldado ha muerto este lunes cerca de Slaviansk en un ataque con mortero de los insurgentes. El Ejército, por su parte, afirma haber acabado con la vida de un separatista en la región de Donetsk.
A la violencia se une el boicot de los prorrusos… Pese a todo, el primer ministro Arseni Yatseniuk ha defendido la celebración de los comicios: “En primer lugar, debemos tener un presidente legalmente electo. En segundo, vamos a garantizar que todos tengan igualdad de oportunidades para participar en el proceso electoral. En tercer lugar, cualquier intento por parte de los terroristas en Donetsk y Lugansk de abortar las elecciones está condenado al fracaso”.
La operación lanzada hace más de un mes por el Ejército es vista por muchos independentistas prorrusos como una operación de castigo. Víktor considera que es la respuesta al referendo de independencia en Donetsk y Lugansk.
-“Celebramos una consulta. Votamos. Kiev no reconoce nuestro voto, nuestra opinión. Y esta es su forma de intentar persuadirnos”, dice.
Los insurgentes se han hecho con el control de varios colegios electorales y se han incautado de censos. Kiev ha anunciado que se crearán grupos operativos especiales para garantizar el orden y el proceso electoral en el este de Ucrania.