HAMÁS HA SEÑALADO QUE EL ESTADO DE SALUD DE LOS LIBERADOS CONFIRMA LA BRUTALIDAD A LA QUE FUERON SOMETIDOS EN LAS CÁRCELES ISRAELÍES, Y CONTRASTA CON EL ESTATUS DE SANIDAD EN QUE EL GRUPO DE RESISTENCIA PALESTINO HA ENTREGADO A LOS REHENES EN SU PODER. ADEMÁS PRECISÓ QUE LA CRUZ ROJA INTERNACIONAL DEBE TRABAJAR MÁS EN EL MONITOREO DE LA SITUACIÓN DE LOS PALESTINOS ENCARCELADOS INJUSTAMENTE POR RÉGIMEN ISRAELÍ Y EXIGIR RESPETO HACIA SUS DERECHOS SEGÚN LAS LEYES DEL DERECHO INTERNACIONAL HUMANITARIO. ESTÁS VIOLACIONES CONSTITUYEN CRÍMENES DE GUERRA Y DE LESA HUMANIDAD. ENTRE LOS ABUSOS SE INCLUYEN TORTURAS FÍSICAS Y PSICOLÓGICAS, NEGLIGENCIA MÉDICA INTENCIONAL Y HAMBRE SISTEMÁTICA EL CUAL LES PROVOCÓ ENFERMEDADES COMO, LA SARNA ENTRE LOS RECLUSOS.
