Luz Milagros Mendoza, de solo tres años, fue torturada hasta la muerte con palos y cables en un crimen que estremece al país. Mientras el padrastro, Alex Sanabria (24 años, paraguayo), huye con pedido de captura internacional, una pregunta quema en el aire: ¿qué papel jugó la madre? Ella llevó a la niña al hospital alegando una "mordida de perro", pero los médicos descubrieron el horrible engaño: Luz ya estaba muerta, con marcas de violencia extrema. ¿Fue solo encubridora o cómplice directa? La justicia debe investigar hasta el fondo su responsabilidad en este infanticidio.