A medida que se acerca la Semana Santa, la demanda de huevos ha aumentado, lo que ha generado un incremento en los precios. La escasez del producto, debido a las altas temperaturas y la mortandad de gallinas en los últimos meses, ha afectado la producción. A pesar de ello, algunas empresas han logrado mantener el suministro constante para satisfacer la creciente demanda.