Sebastián Kiczka, acusado de posesión, facilitación y distribución de material de abuso sexual infantil (MASI), declaró en la audiencia de cierre de su juicio. En su testimonio, describió las condiciones de su detención y el trato recibido por parte de las autoridades y profesionales encargados de su evaluación. Relató su experiencia durante el traslado, mencionando situaciones de estrés y violencia física, además de la falta de información sobre su situación. Kiczka también cuestionó el informe de la psicóloga que lo evaluó, alegando que las conclusiones fueron apresuradas y no reflejaban su sufrimiento emocional. Durante su intervención, habló sobre las dificultades que enfrenta en su vida personal debido a su situación, señalando problemas laborales, familiares y psicológicos. Kiczka pidió que se revisen los procedimientos utilizados en su caso, subrayando la importancia de tratar a los acusados con mayor humanidad.
MM