Pasa por ser una de las periodistas que más quebraderos de cabeza le está dando al PSOE y al Gobierno Sánchez.
Ketty Garat, adjunta a la dirección del diario 'The Objective', es de las pocas responsables de la parcela informativa en España que no ha cejado en su empeño de desentrañar y de exponer ante el gran público la corrupción que emana de las cloacas de La Moncloa y de la sede de Ferraz.
En el programa 'Por fin', que presenta Jaime Cantizano en Onda Cero, la periodista hizo un vaticinio sobre cuándo puede empezar a largar Santos Cerdán lo más grande en relación a las prácticas corruptas que se han venido perpetrando en los últimos años bajo el mandato de Pedro Sánchez.
Para Garat, la clave está en ver el tiempo que José Luis Ábalos, que no ha tenido que pasar por la cárcel, ha tardado en soltar material jugoso y lo que puede pasar por la cabeza del exsecretario de Organización del PSOE estando encerrado en la cárcel de Soto del Real:
Atenúo mi condena, teniendo en cuenta que tengo una niña, bueno, no tan pequeña como la de Koldo o como la de Aldama, pero tengo una familia a la que tengo que atender y que está abandonada, una mujer que no trabaja, que tiene una pensión y que por lo tanto tendrá dificultades para salir adelante sin que yo me ponga a trabajar para ayudarles, o callo y asumo mi condición de chivo expiatorio en el Partido Socialista.
La periodista de 'The Objective' tiene claro que Cerdán acabará cayendo en la tentación y casi en la obligación de cantar:
Es evidente que todos van por el primero de los escenarios. La cuestión es en cuánto tiempo. Bueno, pues cuanto más solo se sienta, menos dura ese periodo de reflexión. Y dentro de la cárcel es como un agujero de gusano. Vale cinco veces lo que es la vida real. El tiempo que los ha podido asumir su condición de chivo expiatorio fuera de la cárcel, dividámoslo entre cinco y es lo que nos va a salir el tiempo en el que Santos Cerdán empieza a cantar La Traviata.