El interior cuenta con un innovador tejido derivado de neumáticos reciclados, decorado con un logo exclusivo del Cavallino Rampante. El salpicadero y la columna de dirección están realizados en fibra de carbono especial utilizada en Fórmula 1, lo que refuerza aún más el vínculo con el ADN deportivo de Ferrari.
Esta unidad excepcional será numerado 599+1, ya que constituye una unidad adicional a la producción ya vendida de 599 automóviles de edición limitada, y estará provisto de una placa de identificación que atestigua su singularidad. Todos los ingresos de la subasta se destinarán a iniciativas educativas promovidas por Ferrari, con el objetivo de elevar los proyectos educativos a los estándares mundiales, continuando la larga tradición de la marca de Maranello de hacer una contribución a las comunidades en las que opera.